Noticias

Santa cruz FM

La Parroquia San Antonio de Padua de Chépica celebró su Bicentenario con una emotiva misa.

WhatsApp Image 2024-10-05 at 12.42.45

Con gran fervor religioso y una ceremonia solemne, la comunidad de Chépica conmemoró los 200 años de la fundación de la Parroquia San Antonio de Padua. La misa contó con la presencia del Obispo de Rancagua, autoridades locales y fieles.

Este pasado viernes, la Parroquia San Antonio de Padua en Chépica celebró sus 200 años de historia con una misa especial que reunió a cientos de fieles en un acto cargado de espiritualidad y emotividad. La ceremonia, presidida por el Obispo de la Diócesis de Rancagua, Monseñor Guillermo Vera Soto, destacó la importancia histórica y cultural de la iglesia en la vida de la comunidad.

Durante la homilía, Monseñor Guillermo Vera, hizo un llamado a la unión y al fortalecimiento de los valores cristianos que han sido el pilar de esta parroquia desde su fundación en 1824. “Ustedes, como comunidad parroquial, se han preparado durante mucho tiempo para llegar a celebrar esta fiesta: los doscientos años de vida parroquial. Pero nosotros tenemos que mirar mucho más allá. Sí, son doscientos años de la parroquia, pero son más de cuatrocientos años desde que la cruz de Cristo fue plantada en esta tierra. Más de 400 años en los que sus mayores aprendieron aquí el Padre Nuestro, el Ave María, rezaron el credo, rezaban la salve y cantaban el “Bendita sea tu pureza”. Son más de 400 años de fe. Y porque lo que los primeros misioneros fueron enseñando, fueron predicando aquella primera siembra del evangelio.”, expresó.

La Parroquia San Antonio de Padua, fundada en 1824, ha sido un pilar fundamental en el desarrollo espiritual y social de la comuna de Chépica. Su historia, marcada por la devoción y el servicio, ha acompañado a generaciones de fieles en momentos de alegría y dificultad, consolidándose como uno de los patrimonios más valiosos de la región.

El párroco encargado de la Parroquia San Antonio de Padua, Chépica, Pbro. Juvenal Galaz comento “Antes de decirles feliz bicentenario, quiero agradecer a cada uno de ustedes, querida comunidad, agentes pastorales, fieles. Lo hemos dicho muchas veces, ustedes son la familia espiritual que Dios me ha regalado para este tiempo de apostolado y ministerio. Como ya lo he expresado en algunas oportunidades, en ustedes reconozco cómo Dios sí cumple su promesa de regalarnos el ciento por uno en padres, en madres, en hermanas y en hermanos”.

El Bicentenario de la parroquia representa no solo una celebración religiosa, sino también un testimonio de la fortaleza y el arraigo de la fe en la vida de los habitantes de Chépica, quienes se preparan para continuar forjando una comunidad más unida y comprometida en los próximos años.

Compartir Noticia